en 1910 eran novios..... ella se quedó esperándolo en España y él se vino a Magallanes buscando un horizonte mejor para los dos.
Como eran del mismo lugar , las familias se conocían y finalmente todos emigraron hacia donde había marchado Ricardo y otros mozos del pueblo.

durante los años de espera, Marcelina fue juntando postales en este álbum

aquí atesoró 87 tarjetas de amor que recibió de su novio Ricardo

están la "bella Otero", María Vinent, muchos niños y abundantes flores

el amor que se destila en estos mensajes centenarios y que se conservan hasta hoy, puestos aquí, son mi modesto homenaje para quien ofició de abuelo y me regaló tanto amor cuando pequeña.
Hola llego a ti por el blog de Al. Soy gallega me encanta encontrarte.
ResponderBorrarAmenazo con regresar.
Un abrazo desde galicia ( España)
Lindos recuerdos atesoras...
ResponderBorrarno los pirdsa por ningún motivo
por ningún motivo los perderé, el problema es pasar la posta para que alguien los herede, creo tener solucionado el problema, mis hijos se repartirtán los tesoros. Saludos Beatriz
ResponderBorrarHola Beatriz
ResponderBorrarVuelvo a visitarte y vuelvo a admirarme.
Bravo.
El Guanaco Volador desde un ordenador ajeno
beatriz
ResponderBorrares un material que habla por sí solo
cuenta una forma de amr y de jugarse en la espera,así como arriesgarse en irse solo a establecerse lejanmente de la tierra y los quereres...
a eso le sumas las palbras de union tuyas que tienen la ternura de un relato palpado en las caras de sus protagonistas
un gusto pasar
carños (te contsté en mi blog,tu pregunta)
Honrar la vida en el pasado es amarla hacia el futuro.
ResponderBorrarUn beso grande