Un tiempo la luz me mantuvo ciega otro tan oscuro pensé en morir
y de pronto estaba a mitad del camino
Entonces pregunté:
¿Qué es la trascendencia?
Me mostraron a mis hijos
y juré nunca más hacer preguntas
Adonde vaya, de donde venga
soy sólo huesos
y un vaso de agua de mi estatura
Leo el i ching, el tao, la biblia,
los avisos luminosos, el diario
con esos ojos secos de los analfabetos
Mirka Arriagada
Pintura: Eve. Istvan Sandorfi
Pintura: Eve. Istvan Sandorfi
La pintura y el poema son muy tristes, la pintura muestra tonos blancos y negros, a pesar de eso son muy buenos.
ResponderBorrarLa luz la dejó ciega, la oscuridad le hizo desear la muerte, ya pregunta fue respondida de un modo que ella no esperaba.
El poema es como la vida.
Saludos
muchas veces nos sentimos así.
ResponderBorrarComo la pintura, es muy bonita aunque denota tristeza, pero me encantó!!!!
Qué lindo, pero qué triste.
ResponderBorrarBesos.
Precioso, todo...la pintura, el poema...el blog...
ResponderBorrarMe encanta, llevo un buén rato, y ya estoy enganchada a él...volveré, sin lugar adudas...
Gracias, un abrazo.
Los hijos y los hijos de los hijos...
ResponderBorrarMe hace sentir de modo contradictorio. Seguro que una luz me mantiene ciega.
Un abrazo!!
Qué lindo es entrar a tu blog, la foto de esa niña tierna y linda, como mi muñeca de mi niñez. Y tus poemas y sus pinturas.
ResponderBorrarTu blog, tu casa, tan distante del mundo diario, si te conocieran podrían mejorar los titulares de las noticias.
Cariños, G.
Una noche ariqueña me aburrí de estar norteando y me encontré sureando con mi propio aprendizaje
ResponderBorrarHermoso blog
¿A quién tengo el gusto de saludar?
Mirka Arriagada
A una admiradora de este tremendo poema que se titula Aprendizaje.
ResponderBorrarDesde el sur de Chile,
un gran abrazo
Beatriz