blog de rescate de la historia familiar, de la patagonia, vivencias, recuerdos, arte y poesía
Amadeo
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domingo, 10 de mayo de 2009
Johannes Vermeer (1632-1675)
Quisiera haber vivido aquella tarde de Vermeer,
al desamparo de nubes grises en Delft,
sintiendo la placidez del legendario día,
del tenue sol vespertino,
más allá de las torres.
Y me hubiera gustado corresponder a tu mirada,
a tu pálido encanto, "joven de la perla",
y reptar por esos sensuales labios entreabiertos,
sobre tu figura cándida y acogedora.
Y embriagarme con esa luz drástica,
que anima y abraza los ancestros
que trasciende y ensalza la urbe desolada,
sobre las espectrales sombras del canal.
Quisiera haber vivido aquella tarde de Vermeer,
ser la figura que falta entre tanta soledad.
Antonio Gómez Hueso acá
Precioso poema, ¿Qué decir del gran Vermeer?
ResponderBorrarEsa fusión entre palabras, sentimientos, imaginación y pintura es de una belleza sublime.
¡Precioso!
Qué preciosa pintura Beatriz!!
ResponderBorrarSola bajo el cielo nublado y con el azul del canal estaría de bien :D
"nubes grises en Delft,
sintiendo la placidez del legendario día"
Un abrazo
Inés
Hermoso ensamble entre poema y pintura Beatriz.
ResponderBorrarTe dejo un beso grande.
¡Qué hermosa entrada!
ResponderBorrarHe pulsado el "acá" y la fusión es triple...
Un abrazo más.
¿Buen día de la madre?
Una simbiosis perfecta, Verneer y este poema etan hechos el uno para el otro, Genial entrada
ResponderBorrarOlá
ResponderBorrarRetribuo a visita ao hálito azul da tarde, e estou a gostar muito do seu blog.
Até breve
Ana Isabel