En la misma esquina de este viejo mapa
hay un país que añoro.
Es la patria de las manzanas,
las colinas, los ríos perezosos,
del vino agrio y el amor.
Por desgracia una gran araña
tejió sobre él su tela
y con su viscosa saliva
cerró las puertas del sueño.
Y es siempre así:
el ángel con la espada de fuego,
la araña y la conciencia.
Herbert Zbigniew
Pintura: Dmitri Levin. Apple trees bloomming
Por suerte las arañas pasan, los países quedan. El poeta pudo volver
ResponderBorrarA la orilla misma del mar, calles que encierran historias donde se puede soñar sin tela de araña que nos oprima…
ResponderBorrarPreciosas letras junto a la fresca pintura de Dmitri Levin.
…al atardecer me gusta deambular por los confines de la Ciudad
a lo largo de las fronteras de nuestra libertad...
(Herbert)
Caty
Querida amiga, gracias por avisarme, he tratado de arreglar mi blog, dime si ya puedes ver bien.
ResponderBorrarBesos Isthar
Cuánto mejor es el país, mayor es la ambición de la araña.
ResponderBorrarQuiero entrar a ese sendero...Nunca he visto manzanos de verdad, sólo fotos.
Quien pudiera pasear por esos manzanos y sentir su frescor
ResponderBorrarAnimo!!!, que es solo una araña...
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