Escucha…
¿En qué otro mundo de cerezas raras oí tu voz?
¿En qué planeta lento de bronces y de nieve,
vi tus ojos hace un millón de siglos?
¿Dónde estabas?
Fuiste agua hace mil años.
Yo era raíz de rosa, y me regabas…
Fuiste campana de pagoda,
yo era nervio del ojo que miró a tu bronce.
Nos hemos perseguido,
alma con alma, atravesando cuerpos
peregrinos de venas y latidos,
por pieles de animales, por estambres,
escamas, esqueletos, cortezas;
por mil cuerpos y sangres diferentes,
alma con alma,
cincelando torres de espíritu
con lágrima y sonrisa.
…Hoang:
Tú fuiste, Cui-Ping-Sing,
todo lo claro,
el cisne o la ceniza.
Yo fui todo lo oscuro,
la raíz, la tortuga.
Tus pechos
son dos nidos calientes,
tejidos en la rama de un almendro.
Cui Ping Sing. Foxá
Pintura:Xu Fang
http://manuelblascuatro.blogspot.com/2010/11/cui-ping-sing-de-agustin-de-foxa.html
ResponderBorrarHola!!!
ResponderBorrarQue delicadeza, seguro que se nota en el aire su presencia….
Un abrazo de oso.
There's a nice simplicity and delicate balance in this. I like it very much.
ResponderBorrarUna joya Beatriz.
ResponderBorrarAdmiro tu capacidad para encontrar lo mejor, eso es sensibilidad querida.
Besitos.
Gracias Común, es delicadeza la palabra, gracias.
ResponderBorrarI like it, too Susan. Muchas gracias
Carmen: tú eres la maestra, si te ha gustado a ti, la entrada es buena entonces.
Amé a Cui Ping Sing a pesar de su decisión.
Abrazos a las tres.
A ud les ha pasado?.Cuando conocí a mi marido pasé màs de un mes sin verlo.
ResponderBorrarMe impresiona tanto pensar que durante todo ese tiempo sabía que él sería el definitivo.
No se si otra vida me proporcionò tal información.
Es fuerte sentir así, saber a primera vista que la persona que se conoce será para toda la vida.
ResponderBorrar¿de dónde saldrá esa información?
De otras vidas tal vez.