Amadeo

martes, 15 de octubre de 2013

Vamos por la vida...


Vamos por la vida de desengaño en desengaño. 
Si los encerramos dentro de nosotros 
y no se los mencionamos a
los demás, 
a eso se le llama optimismo vital. 
Pero empiezan ya en la infancia
 y continúan hasta el final de la vida.

Seifert
Pintura: Kershishnik

2 comentarios:

  1. Tal vez para abanicos sean adecuados, al menos que "nos vayan dando viento fresco"
    -Los escribo, los recorto y ventilando, que es gerundio-
    ¿Se dice en Chile eso de que..."anda y que te vayan dando viento fresco"?
    ¡Optimismo vital! Ommmm...
    Ay, amiga. Besos (Hoy es dieciséis...)

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  2. jaja optimismo vital ya no me queda.
    No me digas que es 16....volver a los 17 quisiera yo. Que el de mañana me trae cambio de folio. Nooooooo!!!!!

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