Imaz, de Alzo, plantó un retoño de haya
en el monte Basaitz, el año que conoció a su mujer.
Lo cuidó con esmero durante toda su vida,
y rodeándolo con su cinturón notaba cómo crecía.
Fue uno de los mejores escribiendo coplas,
y murió en 1893. Su mujer, veinticinco días después.
Para abarcar el contorno del haya, hoy en día
le haría falta un cinturón de cinco metros.
Kirmen Uribe.
Ken Bushe
Precioso!!!!
ResponderBorrarBesosss, Beatriz