Caras.
Millones de caras en la superficie del mundo.
Aparentemente todas diferentes
de aquellas que ha habido y habrá.
Pero la Naturaleza -cualquiera la entiende-
quizá cansada del incesante trabajo
repite sus antiguas ideas
y nos pone caras
de segunda mano.
Igual te cruzas con Arquímedes en vaqueros,
Catalina la Grande con ropa de rebajas,
un faraón con gafas y maletín.
La viuda de un zapatero sin zapatos
de una Varsovia aún pequeña,
el maestro de las cuevas de Altamira
con sus nietas camino del ZOO,
un vándalo peludo yendo al museo
a extasiarse un poco.
Caídos de hace doscientos siglos,
de hace cinco siglos
y de hace medio siglo.
Alguien transportado por aquí en una carroza dorada,
otro en un vagón al exterminio,
Moctezuma, Confucio, Nabucodonosor,
sus ayas, sus lavanderas y Semíramis
hablando sólo en inglés.
Miles de millones de caras en la superficie del mundo.
Tu cara, la mía, la de quién -
no lo sabrás nunca.
Quizá la Naturaleza tenga que engañar,
y para llegar a tiempo, y para dar abasto
Wislawa Szymborska
Pintura:M. Houssin
Esta mujer no deja de sorprenderme. Pero cuantas veces en la vida, en una estación cualquiera hemos pensado (creo) cosas semejantes, y con que gracia y naturalidad lo describe.
ResponderBorrarMaravillosa entrada.
Un abrazo, amiga.
Me voy a mi casa de Diamante ,por los días santos ,LES DEJO A TODOS MIS DESEOS DE FELICES PASCUAS.
ResponderBorrarGracias Eva, pienso lo mismo: ¡Maravillosa!
ResponderBorrarTambién para ti Ana María que disfrutes y descanses.
Me gustó. También lo dice Eva. Pareciera que alguien de nosotros, el que pueda aún escuchar alguna nota musical en medio del ruido, pudo haber escrito esos "pensamientos".
ResponderBorrarTe aprecio.