Silencio de cal y mirto.
Malvas en las hierbas finas.
La monja borda alhelíes
sobre una tela pajiza.
Vuelan en la araña gris
siete pájaros del prisma.
La iglesia gruñe a lo lejos
como un oso panza arriba.
¡Qué bien borda! ¡Con qué gracia!
Sobre la tela pajiza
ella quisiera bordar
flores de su fantasía.
¡Qué girasol! ¡Qué magnolia
de lentejuelas y cintas!
¡Qué azafranes y qué lunas
en el mantel de la misa!
Cinco toronjas se endulzan
en la cercana cocina...
LorcaMalvas en las hierbas finas.
La monja borda alhelíes
sobre una tela pajiza.
Vuelan en la araña gris
siete pájaros del prisma.
La iglesia gruñe a lo lejos
como un oso panza arriba.
¡Qué bien borda! ¡Con qué gracia!
Sobre la tela pajiza
ella quisiera bordar
flores de su fantasía.
¡Qué girasol! ¡Qué magnolia
de lentejuelas y cintas!
¡Qué azafranes y qué lunas
en el mantel de la misa!
Cinco toronjas se endulzan
en la cercana cocina...
Pintura: Light candle. Zhang Yibo
4 comentarios:
Hola Beatríz.
Del Romancero gitano, entre otros, este poema está dentro de mis favoritos. Como así también Es verdad, me parecen delicados y suaves.
" ¿Quién me compraría a mí
este cintillo que tengo
y esta tristeza de hilo
blanco, para hacer pañuelos?..."
La pintura es hermosa.
Besos.:-)
Lorca va más allá de lo soñado, de los alhelíes bordados, de la belleza... Inconmensurable, inefable cómo dispara el espíritu. La pintura no le anda a la zaga, una maravilla absoluta.
Hola:
Pasa por mi blog. Dejé un regalito para ti.
Besos.
Muy delicado y dedicado trabajo, la luz de las velas y el ambiente recreado en el poema, hermoso.
Un beso
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