En las épocas en que la humanidad
se ve obligada a vivir
sin un fuerte mito común,
esa Historia Mundial en miniatura,
la historia familiar adquiere
una importancia especial
y se convierte en una fuente
de inspiración particular.
Cada familia tiene su Olimpo y su Hades.
se ve obligada a vivir
sin un fuerte mito común,
esa Historia Mundial en miniatura,
la historia familiar adquiere
una importancia especial
y se convierte en una fuente
de inspiración particular.
Cada familia tiene su Olimpo y su Hades.
Sandor Marai
Confesiones de un burgués.
Pintura: Jesús Navarro
14 comentarios:
"Su Olimpo y su Hades"
Márai hubiera sido bueno para "las tertulias en tu casa", su diálogo es tan claro...enlazando con tu entrada de ayer "Tristes formas de comunicarnos" cuando leí "El último encuentro" de Márai me encandiló con aquella pertinaz insistencia en llegar a la verdad.
"Familia", tiene en común a mi parecer esa búsqueda de la verdad, ese deseo de clarificar quiénes eran, cómo fueron sus vidas y sus sueños e incluso ponernos en su piel.
Soy subjetiva opinando.
(Encontré la casa en Google maps)
Ohhhh que nerd soy, nunca la he buscado.
¡Voy allá!
Me acordé de la fonola con madera terciada que me robaron en la casa del campo.
El estado de desastre moral a que ha llegado nuestro país se los relato.
Cuando nacieron mis tres hijos regalé PARA PONER A LA ENTRADA DEL PUEBLO donde tenemos la casa de campo una VIRGEN DE LUJAN o sea la patrona de nuestro país y nuestros caminos.
Un día paso por la entrada del pueblo y la imagen veo que està sustituída.
Pregunto y me dicen que la que regalé fué robada.
A todos nos pueden robar y eso no es nuestra culpa pero ,como soy intuitiva me llamò la atención que la gente NO HUBIESE PROTESTADO O NO HUBIESE EN CIERTA FORMA DESAGRAVIADO LA IMÁGEN.
Un tiempo después paso por la esquina de entrada donde estaba la VIRGEN y haciendo cruz con la misma veo un precario HOTEL ALOJAMIENTO de parejas.
En el pueblo NO HUBO NINGUN TIPO DE MANIFESTACION DE REPUDIO.
Conozco a casi toda la gente ,son hijos quizás de los que acompañaron a mis padres durante mis primeros años(pués ellos allí vivieron dos años )pero DESGRACIADAMENTE SE HAN AGGIORNADO.
Son dolores espirituales que deterioran estos.La imágen tenìa tres pedidos:evitar accidentes en esa entrada peligrosa ,lograr la prosperidad del pueblo y toda su gente ,bendecir al campo argentino y era en agradecimiento por mis tres criaturas.
Vivimos del ayer en nuestros recuerdos con todas esas"cositas" familiares .
Vivimos del mañana- SIEMPRE EN NUESTRAS ALEGRIAS BEATRIZ -porque son nada más que alegrías los progresos de nuestros hijos aún imaginados lejos.
Coincido con Ana. La lectura de "El último encuentro" de Márai, me atrapó desde las primeras lineas,la búsqueda de la verdad como fuerza liberadora. Ayer escribia Ana que quiere la verdad, aunque duela, a toda costa, que no soporta la mentira, yo también la prefiero, la verdad siempre es liberadora, para el que la dice y para quien la escucha.
La familia deberia ser eso, si, pero desgracidamente, no lo es. En la que yo he formado con mi hijo, es la unica condición que hemos puesto, decirnos siempre la verdad, y lo cumplimos.
Abrazos.
eva
Acá hicieron un arreglo teatralizado buenìsimo y con primeras figuras de EL ULTIMO ENCUENTRO.
Duilio MARZZIO encabezó el elenco.
La verdad es algo tan de DIOS ,querida ANA que me parece que una persona tan clara como eres tù y con esa sencibilidad de artista la debes intuir aunque te la nieguen o quieran disimular .
En los gestos ,en los estados de ánimo ,en los enojos sin causa ,no se porqué pienso que tú has de conocer la verdad de tus semejantes.
Un detalle insignificante pero para mi pleno de afecto.
La carpetita al crochet de la pintura es idéntica a la que me obsequió para la mesa del teléfono la señora que atiende mis intereses en el pueblo de mi madre.Esta señora fué una de las cuidò a mi madre en sus últimos dìas y a su vez la que en vida le hacìa los trámites y compras.
Desde hace mucho tiempo que la humanidad no tiene un fuerte mito común.
¿Será verdad que nos hemos introspectado hacia la familia?
Lo decía Marai en 1934 en sus Confesiones de un burgués, Matías.
Aún no había visto nada de lo que sucedió después en el mundo.
Se quitó la vida un poco antes de la caída del muro.
Como enriquecen la entrada con sus comentarios amigas mías.
Mucha gracias.
Ana María, esos detalles "insignificantes" hacen la gran diferencia en las personas, yo al igual que tú, me fijo en ellos constantemente.
Qué entrada, da gusto leer...
Sí, sé casi siempre, Ana María, hay señales en cada gesto, no los tengo en cuenta ni guardo rencores, pero sé.
Publicar un comentario