no se como lo percibirán los niños de ahora, pero, en aquellas épocas remotas, para la infancia que fuimos, nos parecía que el tiempo estaba hecho de una especie particular de horas , todas lentas, arrastradas, interminables. Tuvieron que pasar algunos años para que comenzásemos a comprender, ya sin remedio, que cada una tenía sólo sesenta minutos, y, más tarde aún, tendríamos la certeza de que todos ellos, sin excepción, acababan al final de sesenta segundos...
Saramago
Pintura: T. Duverger
1 comentario:
Sí te tiene atrapada Saramago. En todo caso es un atrapador que vale la pena.
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