miércoles, 28 de octubre de 2009

Ya no tengo ángel de la guarda


Ya no tengo ángel de la guarda.
Un día inesperado se perdió en la llanura
buscando la plenitud y el reposo.
A pesar de todo, el movimiento del cielo no cesa todavía.
Sigo caminando por el bosque con los ojos abiertos,
y a veces siento en el aire una breve eternidad.
Pienso que mi ángel de la guarda
- por ese inmenso cariño por las islas -
está de custodio de las profundidades del mar,
que después de todo, es la otra cara del cielo.
Sé que no está en el monte Nebo
contemplando el tiempo que vendrá.
Mi ángel tenía una larga cabellera negra
y sus ojos te seguían por todas partes.
Cuando iba de paseo en mi bicicleta
su cabello era una llamarada de fuego negro
que llamaba la atención en todo el vecindario.
Nadie la podía ver, excepto mi perro
que agachaba la cabeza
cuando volaba por encima de los geranios.
Ya no tengo ángel de la guarda.
Ahora camino solitario por las oscuras calles de los pinos
y presiento que alguien todavía me vigila.


Miguel Angel Zapata
Pintura: Abbott Thayer

5 comentarios:

Anónimo dijo...

ya verás como vuelve, con un poco de esperanza y paciencia volverá...
Un bonito poema.
Un saludo

Pame Recetas dijo...

Eso le pasó al poeta por andar distraído creo yo. Qué tristeza!

Sid dijo...

Pero quien es el que te vigila?

Odel dijo...

Cuando menos te lo esperas ,seguro que aparece

Adriana dijo...

Todos tenemos nuestro angelito; ya lo dijo Gabriela Mistral...

Es verdad, no es un cuento;
hay un Angel Guardián
que te toma y te lleva como el viento
y con los niños va por donde van.
Tiene cabellos suaves
que van en la venteada,
ojos dulces y graves
que te sosiegan con una mirada
y matan miedos dando claridad.
(No es un cuento, es verdad.)


Sólo que a veces está ocupado o distraido, pero siempre está.
Besitos. Cariños para vos y los tuyos.:-)

Related Posts with Thumbnails