Los muebles de caoba perpetúan
entre la indecisión del brocado
su tertulia de siempre.
Los daguerrotipos
mienten su falsa cercanía
de tiempo detenido en un espejo
y ante nuestro examen se pierden
como fechas inútiles
de borrosos aniversarios.
Desde hace largo tiempo
sus angustiadas voces nos buscan
y ahora apenas están
en las mañanas iniciales
de nuestra infancia.
La luz del día de hoy
exalta los cristales de la ventana
desde la calle de clamor y de vértigo
y arrincona y apaga la voz lacia
de los antepasados.
entre la indecisión del brocado
su tertulia de siempre.
Los daguerrotipos
mienten su falsa cercanía
de tiempo detenido en un espejo
y ante nuestro examen se pierden
como fechas inútiles
de borrosos aniversarios.
Desde hace largo tiempo
sus angustiadas voces nos buscan
y ahora apenas están
en las mañanas iniciales
de nuestra infancia.
La luz del día de hoy
exalta los cristales de la ventana
desde la calle de clamor y de vértigo
y arrincona y apaga la voz lacia
de los antepasados.
Borges
Pintura: Jaume Queralt, contraluz
3 comentarios:
Muy bonito Beatriz, que no se pierdan nunca esos testimonios del pasado.
Un abrazo
Que desgarrante ,pensar que hay casas en donde esas voces del pasado claman en todos los recuerdos sin que sean oídas.
Yo he estado en salas así de vacías y se siente el silencio, una solemnidad pesada, parece que en el aire estuvieran flotando sus habitantes del pasado.
Desgarrador como dice Ana María.
Gracias Inés y Ana María.
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