Porque todo es igual y tú lo sabes,
has llegado a tu casa, y has cerrado la puerta
con ese mismo gesto con que se tira un día,
con que se quita la hoja atrasada al calendario
cuando todo es igual y tú lo sabes.
Has llegado a tu casa,
y, al entrar,
has sentido la extrañeza de tus pasos
que estaban ya sonando en el pasillo
antes de que llegaras,
y encendiste la luz para volver a comprobar
que todas las cosas están exactamente
colocadas como estarán dentro de un año;
y después,
te has bañado, respetuosa y tristemente,
lo mismo que un suicida,
y has mirado tus libros como miran los árboles sus hojas,
y te has sentido solo,
definitivamente solo porque todo es igual y tú lo sabes.
La casa encendida, Luis Rosales
Pintura: Chang Warren
5 comentarios:
Gracias.
una casa vaciá siempre permanece igual.sin cambios todo
Cambiando de tema echo de de
de tema echo de menos de tema echo de de menos a ana jimernez
abrszo
No he leído o no recordaba este poema, difícil no recordarlo...¡No lo habré leído! ¡Qué belleza, cuánta verdad!
Francisco, un abrazo.
Un abrazo, Beatriz.
Es bello, pero desolador.
Hola Duna ¡Bienvenida!
Que cuadro maravilloso!!!!
Lástima ,a veces las casas más lindas son las de los solitarios.
En aquellas donde hay mucha gente el desorden reina y a veces el buen gusto escasea.
Me imagino la tuya BEATRIZ con los nietos.Nada en su lugar .
Pero estan todos .
Publicar un comentario