En los meses sombríos mi vida resplandecía
solo cuando nos amábamos.
Como la luciérnaga se enciende y se apaga,
se enciende y se apaga
en un destello uno puede seguir su trayecto
en la oscuridad de la noche entre los olivos.
En los meses sombríos
En los meses sombríos
el alma estuvo hundida y sin vida
El cielo nocturno mugía.
pero el cuerpo iba derecho hacia ti
Ordeñábamos el cosmos a escondidas y sobrevivíamos.
Tomas Tranströmer
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