"Todo le parecía creado en la naturaleza con una lógica absoluta y admirable. Los principios y fines se equilibraban perfectamente.
Las auroras se habían hecho para hacer alegre el despertar,
los días para madurar el trigo, las lluvias para regarlo,
las tardes oscuras para predisponer al sueño, y las noches para dormir.
Las cuatro estaciones correspondían totalmente a las necesidades de la agricultura;
y jamás el sacerdote sospecharía que no hay intenciones en la naturaleza,
y que todo lo que existe, al contrario de lo que él pensaba,
se sometió a las duras necesidades de las épocas,
de los climas y de la materia."
Guy de Maupassant "Claro de luna"
Guy de Maupassant "Claro de luna"
Cuadro: Francois Laugee
3 comentarios:
¡Qué armoniosa communión!
Saludos
¡Qùé buena cita!
Y la pintura... preciosa.
Lo mutable tiene que adatarse a lo inmutable par poder sobrevivir.
Un saludo.
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