Yo vivo bajo un poder
que a veces está en el sueño,
en el sonido de ciertas palabras agrupadas,
en cosas que dentro de mi
refulgen como oro:
la palanganita de lata donde mi padre
hacía espuma con la brocha de la barba.
De todo tejo un vestido y me cubro
pero si olvido la paciencia,
se me escapan el cielo
y la margarita del campo.
Adelia Prado
Pintura: Harald Sohlberg
Adelia Prado
Pintura: Harald Sohlberg
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3 comentarios:
Sugerente, precioso y encantador poema así como el cuadro acompañante.
Un saludito.
Yo nací a miles de kilometros de ese lugar tuyo del que guardas un recuerdo como ese de la palanganita de tu papá en el que mojaba la brocha... Pero ese mismo recuerdo es uno de los que guardo de mi padre, las mañanas tempranas de domingo, con las campanas de la iglesia dando el primer aviso.
Conclusión: todos estamos hechos de la misma esencia, sea La Patagonia o la Tierra de Campos de Castilla...
Un placer encontrarte (re-encontrarnos?)
Gracias Elena por tu comentario.
Bienvenido profe a este blog, te da la bienvenida otra profe.
Concuerdo con tu comentario, estamos hechos de la misma esencia y muchas veces coincidimos en los recuerdos, sólo que no nos comunicamos lo suficiente para saberlo.
La poesía hace ese milagro y muchos otros.
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